A California, señores,
me voy, me voy.
Si se mejora la suerte
ya saben adonde estoy.
Si me toco con la muerte
chileno soy.
A California, señores,
me voy, me voy.

Chileno de los valientes
tengo el corazón de cobre
llevo el corvo entre los dientes
para defender al pobre.

Le digo al que se me atreva
que donde las dan las toman.
No voy a pelar la breva
para que otros se la coman.

A California, señores,
me voy, me voy.

El oro de California
lo tengo ya en el bolsillo
y lo va a desenterrar
la punta de mi cuchillo.

El que se quiera volver,
el que no quiera pelear,
no nació para soldado:
que se vuelva por el mar.

A California, señores,
me voy, me voy.